Hoy último día antes de la carrera de mañana. La verdad que es curioso comprobar lo que cambia un circuito de un día para otro en función de la gente que haya entrenado, y más si es uno que el terreno está seco seco como el de Becerril. Por lo menos ya le he pillado bien el truco, y si bien es cierto que sigo teniendo el motor vespino, por lo menos haber si a un ritmito alegre y continuo podemos evitar ser doblados. Al final di 3 vueltas, 2 suaves y una alegre, y las sensaciones fueron buenas para haber dormido sólo 5 horas (la noche anterior tocó cena de graduación y la fiesta, eso sí, alcohol 0). La anécdota del día ocurrió bajando el primero de los tramos de descenso tras el pedrolón que se hace andando. Voy tranquilamente, ya que Borja se había ido por delante, y oigo detrás mío a un tío que me achucha...¿pero quien coño será el tío?, al rato, en cuanto puede me adelanta: Iñaki Lejarreta, del Orbea. Tan pronto lo vi como lo dejé de ver. Lo bueno que al final de la vuelta estaba hablando con Borja y charlé un rato con él sobre las carreras y demás antes de comenzar la 2ª vuelta.
Luego después de entrenar y empezar a guardar la bici (habíamos sido capaces Borja y yo de meter las bicis en el buga, toda una odisea), aparecieron Javi y Dani de la grupeta de marcelino, buenos chavales....haber si mañana veo a alguno un rato, aunque sea en parrilla jejeje. Y para acabar el día, visita a Juanjo Wiggins para quitarle los cuernos a la bici, que en otros no, pero en este circuito es recomendable, y eso que yo soy de usar acoples siempre.
Así que ahora, a descansar hasta mañana.
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