Carrera Navidad Navaluenga

Hoy ha sido uno de esos días que se te quedan grabados en la retina. Recuerdo como no los 10000 del Soplao, la primera Perico que hice y aquella en la que hice 5 horas justas, mi primer (y hasta la fecha único) campeonado de Madrid, la 1ª vez que hice la prueba de Colmenar, etc... Navaluenga ha entrado en este club.

No os imagináis lo bien que me lo he pasado hoy con la bici, ha sido uno de esos días que responden a todas las preguntas que te haces cuando estás entrenando y el run-run de la cabeza te comenta eso de ¿Joaquín, por qué te sacrificas tanto?, ¿para qué salir con tanto frío a entrenar?, ¿merece la pena gastarse tanta pasta en la bici?, ¿no estarías por ahí mejor de fiesta hasta las tantas tomando copas sin parar?, y más preguntas que nos hacemos.

He sufrido muchísimo, de hecho el pulso medio se ha disparado hasta las 184 pulsaciones( nunca he alcanzado tanta media), con una máxima de 200, es obvio que el hecho de estar en Diciembre, fuera de temporada influye, pero igual que a mi, a todos y todas.



Siii ya lo se, la ropa de Fugitive no la llevé,
esa para mañana, que la ropa de los domingos
no hay que mancharla jejeje.



Pero comencemos a hablar de la carrera un poco en sí.

Nada más llegar, lo típico, recogida de dorsal, cambiarse, preparar la bici, etc...decir que para ser la zona de Ávila, tradicional por su frío, la verdad que me esperaba más, incluso me atrevería a decir que hacía una temperatura agradable.

Al poco de estar recogiendo la bolsa para guardarla en el coche, apareció Luis, un compañero de la grupetta, con el cual me puse a charlar un rato y comencé a calentar con él, durante el calentamiento, nos econtramos con Carras y David, con los que nos pusimos a charlar un rato antes de la salida.

Ya en la salida, pues vamos a ser realistas, digamos que bien bien colocado no estaba, ya que me encontraba en todo el centro del paquete, pero bueno oye, es lo que hay, y total, como lo único que quería era pasarmelo bien, y tener por así decirlo un test para ver como estoy, tampoco vamos a ponernos a sacar los codos para ganar 3 puestos.

Además, al poco de la salida, debido a que me moví bien,  adelanté bastantes plazas, en un inicio que es peligroso, ya que es un callejeo constante por el pueblo, y como podréis imaginar, la Gran Vía como que no es.

Segun cogemos el camino, se vadeaba un río, un tramo que me hizo gracia, pues había un par de tramos que había que hacer bajados de la bici, aunque la temperatura del agua como que calentita no estaba, mas bien, al pisar oías el crack-crack del hielo al romperse.

Este tramo lo hice a rueda de David, pero al poco, como me comentó que se lo iba a tomar por calma (porque como le dé por abrir gas cualquiera lo ve) pues tiré un poco para delante.

Llegamos así a la 1ª de las 3 subidas, en la que me encontré con Luis, y juntos que tiramos el resto de la prueba. Me hacía gracia, en las subidas le metía tiempo, pero en cuanto llegaban las bajadas, me volvía a coger.



En la foto no se aprecia, pero es una subida
tipo Maliciosa (Sierra de Madrid) para que
os hagáis una idea.



Piano piano, tocó realizar la 2ª subida. Increíble, una subida por cemento con tramo de hasta el 20%, un tramo alucinante, primero porque era aquí donde se concetraba más gente, y segundo, porque era en ese tramo en donde más se doblaban las bisagras, es la 1ª vez que me da por ponerme a contar las caras del tornillo de la dirección de lo doblado que iba, como me gustan este tipo de subidas. Yo, que aunque no había corrido, estaba siendo bien advertido por Luis, decidí guardar un poco al principio de dicha subida, para luego apretar desde la mitad en adelante, en lo más duro de todo, como los machotes. La cosa es que me funcionó, eso si, el buzón lo llevaba abierto a tope, no entraba más aire por ahí. A su lado, una extracción múltiple de muelas del juicio sin anestesia, una bendición.

A ritmito (esto es, a unos 7-8km/h) coronamos, y comienza un tramo de llano pestoso, pero que permite meter el 42, lo cual la verdad que es un alivio, y el 27 lo guardas para lo que es jeje.

La bajada, pues bueno, de las de llevar el sillín en el pecho, y tocar bien los frenos. Un paisano se fué al suelo delante mía, pero sin más consecuencias que el revolcón por la tierra.

Como era de esperar, durante esta bajada me volvió a coger Luis, bueno, a estas alturas ya sabréis que lo típico.

Y comenzamos, casi sin descanso, la 3ª subida, la última y más larga, una subida que es de tipo Zetas, pista ancha, buen piso, y de ritmito, aunque esta con el 42 no se podía hacer. Aquí, pasé una pequeña crisis, pero la verdad que pequeña, porque apenas fueron 2 minutos los que perdí comba de la rueda de Luis, aun así en un descansillo apreté, me volví a colocar con él, y a relevos.

Y así, a ritmo, coronamos, y nada más coronar, metemos el plato grande y a toda pastilla por un pequeño plano de unos 2 km. antes de afrontar la bajada del río. En este inicio del descenso, fué donde Luis me dijo "Mucho cuidado Joaquín que es una bajada peligrosa", y ya la próxima vez que lo ví fué en la línea de meta, a donde había llegado 3 minutos antes que yo ¡¡¡flipante!!!, me metió 3 minutos en apenas 8km; eso quiere decir que tengo que mejorar muchísimo en el descenso.

La leche que bajada, de pedrolos sueltos que cada vez que golepaban al cuadro le entraba a uno un escalofrío solo de pensar en él, aunque parece que los Brutentag de KTM hacen buenos cuadros. Así, con los brazos destrozados (y eso que la horquilla tragó todo lo que pudo y más) y los cuádriceps reventados, llegué al último tramo de llaneo con el piloto de la reserva. En este último tramo me pasaron 4 corredores más, pero es que yo ya no daba más de mí, y es lo que hay.

Así, dándolo todo, pero muy muy feliz, entré en meta, disfrutando de un auténtico día de BTT.

Al final, el 64 de 168 creo, el 11º Sub-23, y a 17 minutos de Mancebo.

La enhorabuena a Borja (que al final sólo lo vi en la meta y estube charlando un rato con él) que hizo 3º, y eso que está fuera de forma, en cuanto la pille, a este no hay quien lo tosa.

Y a Luis, que se metió entre los 10 primeros Máster-30 y para eso hay que andar y mucho, además, que luego en el sorteo le dieron un bonito regalo.

Lo dicho, un día de 10, para un circuito de 10, y un rendimiento de 9, pues tengo que mejorar mucho en las bajadas, pero esto como los resultados a base de entrenamientos llegan.

Me sorprendió bastante el estado físico que tengo, pensé que iba a estar bastante peor.

Y mañana, 2º capítulo, El Pavo de Fuenlabrada.