miércoles, 18 de abril de 2012

LIV G.P. Cuéllar

El pasado domingo cambié las ruedas gordas por las finas para ir a correr a Cuéllar, quedé con Dani, que este año ha decidido probar la carretera después de estar todo el invierno compitiendo en ciclocross. El pueblo está a unos 40km. de Segovia aproximadamente, y se celebraba la LIV Edición de G.P. de Cuéllar (¡54 Ediciones Que Bestias!) , conocido popularmente como la Carrera de la  Chuleta, por eso de que un tramo del recorrido pasa por una zona donde está todo el mundo haciendo barbacoas.
El circuito era de unos 36km. aproximadamente, al que se le debían de dar 5 vueltas para completar un total de 165km. Un circuito muy plano, con el repecho del pueblo nada más, y muy abierto, lo que como podéis suponer, hacía que el aire entrase de lo lindo.
El objetivo era claro, terminar la carrera, y sabía que iba a ser muy complicado, ¿por qué?, primero porque aunque ya vamos subiendo, mi estado de forma no es óptimo, segundo, porque no estoy acostumbrado a meterme más de 100km. a toda pastilla, y tercero, porque en esta disciplina tener un equipo se nota y mucho.

LA PRIMERA VUELTA
La salida por lo menos fue bastante tranquila, nada que ver con las salidas de btt. Fue un momento chulo, porque había bastante gente a ambos lados del repecho aplaudiendo, parecía como cuando en las clásicas suben un muro y está todo el publico a ambos lados de la carretera (salvando las distancias claro), y yo iba en la mitad del paquete, porque tampoco quería ir delante dándome mamporros todo el tiempo por ocupar la posición.
A la salida de Cuéllar, entrábamos en una carretera de doble sentido, muy abierta, pero todavía no se apretaba mucho, y había algún momento de charla en el paquete. Pero así, de golpe y porrazo, aquello se empezó a acelerar cosa fina, y ya la velocidad no bajaba de 40. Pasamos una aldea a toda pastilla, y a la salida de la aldea sí que se apretó y mucho. Se empezó a encunetar todo el paquete, y poco a poco empezó a incrementarse la velocidad, 40,45,50,55,56,57,59,60km/h a la hora en el plano, y con el viento entrando de cara. Alucinante, y todo esto  por la cuneta, es decir, por la mitad del arcén. Yo iba flipando, solo veía la rueda del delante, y rezaba para que si había un hoyo o agujero o algo estuviese avispado y avisase con tiempo.
Así nos tiramos 4-5km, hasta llegar a la entrada de un nuevo pueblo, donde se frenaba un poco, se hacía un giro de 90º a la izquierda, y enfilábamos durante 10km. aproximadamente muy planos hacia Cuéllar. En este momento, Dani que iba detrás mía, me dijo que estábamos en la parte trasera del paquete, que había que tirar para delante. Nos pusimos por el arcén izquierdo, y adelantamos un montón de plazas hasta llegar a la cabeza del paquete. El problema es que como la gente todavía tenía fuerzas, ir en la cabeza era un peligro del copón, porque se iban dando unos bandazos de lado a lado del arcén de la leche. Tan pronto estabas en la derecha, como cruzabas toda la carretera y te encunetabas a la izquierda. Encima, si no vas muy sobrado de fuerzas como me pasó a mi, no tienes posibilidades de arrancar por probar un poco, y te tienes que conformar con ir ahí, en medio del paquete a velocidad crucero (lo que viene siendo ir a 45). 
En este tramo había también gente animando, porque era donde se hacían las barbacoas con las chuletas, y podías oler la panceta en la brasa. A continuación, el terreno se volvía ascendente, entrabas en Cuéllar de nuevo,  comenzabas otra vez a subir el repecho.

POR LAS CHINAS
Y otra vez, cuando pasamos el repecho, viene Dani y me dice que otra vez para delante.
-¡Pero si no nos han adelantado tanta gente!
-No, es que ya hay un montón de gente fuera de carrera.
De nuevo apretando, y avanzando posiciones, venga calentura de patas. Volvemos a pasar por la aldea, esta vez más rápido que en la anterior vuelta, y a la salida, otro apretón más. Eso era insoportable, vas sin posibilidad de avanzar, y las chinas de la cuneta van saltando todo el tiempo. Y lo pero no es eso, lo peor es el dolor de patas que uno tiene, sin posibilidad de bajar otro piñón porque ya vas con el 53x11, y vas viendo como te van metiendo algún metro el que va delante tuya. Pero claro, tienes que apretar, porque si dejas que te metan metros, entra mucho aire y te cortas. Más que dolor y cansancio, es estrés lo que hay en esas situaciones.
Por suerte, hubo un ligero parón, y nos reagrupamos de nuevo, aprovechando para comer y beber en ese momento de respiro. Llegamos al pueblo donde se gira a izquierdas para enfilar por la carretera de la chuleta, y a la salida de éste si que no hay piedad. 

SÁLVESE QUIEN PUEDA
Aquello se puso hecho unos zorros. No se quién demonios se pondría a tirar delante como un burro, pero por detrás íbamos encunetados al máximo (de hecho, alguno iba por encima del césped de la cuneta como pude comprobar), y a una velocidad muy alta (por encima de 50), y ojo, como siempre, el viento de cara. Aquí vi como la gente iba reventando, simplemente dejaba de dar pedales y se descolgaba. Yo iba suplicando porque eso acabase ya, y que no se cortase el que iba delante mía. Y no fue ese quien se cortó, fueron los que iban 3-4 puestos por delante nuestra los que se cortaron a la vez. Es decir, de repente, teníamos que remontar 20 metros, y a esas velocidades y con el viento en contra, fue tarea imposible. En ese momento, cuando levante la cabeza del manillar, aquello era un despelote. Un montón de grupos desperdigados, gente reventada, y abanicos de un lado a otro. Yo me quedé en un grupo de 3, que vimos que eso era tarea imposible, por lo que esperamos al grupo que venía justo detrás.

SE FINI
Y al pasar por el pueblo, comenzamos una nueva vuelta, la 3ª, en un grupo de 7-8 que nos dejaron fuera de carrera. Bueno, por lo menos, di la vuelta rápido y a relevos con los compañeros para poder entrenar un poco más, hasta llegar de nuevo al pueblo, cambiarme, y esperar al final de la carrera.
En total, terminaron unos 70 corredores de los 170 que salieron, ahí es nada. Y decían que este año terminaron más que de costumbre.
Los datos, y teniendo en cuenta que yo acabé eliminado:
  • 100km.
  • 2 horas y media
  • 40,2km/h de media
  • 170 de pulso medio
  • 195 de pulso máximo.

Bueno, no ha venido del todo mal para ir afinando el motor de cara a este fin de Abril y comienzo de Mayo.


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